Tres soluciones para un escote de vértigo

Manchitas y arrugas son, junto con deshidratación y marchitamiento, los signos que delatan el prematuro deterioro del canalillo, cuya piel excesivamente fina, está poco asistida para soportar las exposiciones al sol y el peso de sus copas.

Una piel diferente

El escote posee una piel muy fina, tan pobre en glándulas sebáceas, que su manto hidrolipídico resulta insuficiente para protegerlo de factores ambientales como el sol. Con una epidermis (superficial) que se deshidrata de forma temprana y una dermis (profunda) de escaso colágeno, revela un deterioro anticipado tendente a las estrías, que sufre mucho con los cambios de peso. Su pobre carga de melanocitos, mucho menor que en otras áreas corporales, explica su fotoenvejecimiento característico, paulatino pero imparable a partir de los 30 años, si lo descuidamos.

Signos que delatan

La aparición del primer estigma anticipa la llegada sucesiva y paulatina de otros que marcarán el envejecimiento del escote con el paso de los años, los cambios de peso, la vida hormonal de la mujer y las exposiciones al sol. Si no se pone remedio anticipado, irán manifestándose signos característicos como arruguitas verticales, manchas oscuras, capilares dilatados, rojeces difusas, pigmentación irregular, atrofia visible, estrías, flacidez, falta de turgencia e incluso, celulitis.

TUNING BUST para las manchas

Manchas oscuras conocidas como hiperqueratosis seniles, rojeces difusas por dilatación de capilares y poiquilodermia (enrojecimiento + alteraciones pigmentarias + atrofia cutánea) constituyen estragos comunes producidos por el sol, que en IML se resuelven en una sola sesión, combinando dos tipos de láser. Según la Dra. Royo, “incluso los casos más severos se solucionan con el Dual Affinity para lesiones pigmentadas y el V Beam de colorante pulsado para las rojeces. Este tratamiento exprés, que solo dura 20 minutos, únicamente precisa anestesia tópica en crema. Debe realizarse con 3 semanas de anticipación al sol, que es el tiempo previsto para la recuperación cutánea, el margen suficiente para que la pequeña costra de las manchas tratadas se desprenda y los micro-hematomas de las rojeces asistidas desaparezcan”.

TUNING BUST para las arrugas

Las arrugas en el canalillo pueden resultar disuasorias, aunque las Body Tapes de Kim Kardashian constituyan el mejor invento para lucir escote hasta la cintura. Ni estas cintas adhesivas, de tela elástica y color carne, que sujetan el pecho sin riesgos, incluso en el Versace de Jenifer López durante el último desfile, pueden hacer mucho por estas líneas que aparecen a partir de los 30 años y se marcan a los 50, por dormir de lado o boca abajo. Tal y como explica la Dra. Royo, “en IML hacemos desaparecer las arrugas profundas con infiltraciones de ácido hialurónico, cuya baja trabeculación y densidad media, permiten nivelar su depresión sin que se note. Las micro-arrugas por deshidratación sin embargo, se tratan con mesoterapia, colocando un fino manto de ácido hialurónico no trabeculado y baja densidad, cuya combinación con silicio y vitaminas, revitalizan la piel y la hidratan de forma sostenida”.

TUNING BUST para el marchitamiento

Para revitalizar la totalidad de la piel cuando el envejecimiento se ha apoderado del escote, IML recurre al láser más nuevo y avanzado. Recién llegado a su plataforma tecnológica como el MUST DE LA REGENERACIÓN CUTÁNEA, consigue resolver este deterioro característico, que se conoce como marchitamiento, por el grano de la textura engrosada, arrugada y deshidratada. Se trata de un equipo que trabaja produciendo columnas de energía, cuyo diámetro, profundidad y densidad, se regulan por el médico en función de la corrección a conseguir. “Estas micro-columnas -explica la Dra. Royo- inducen una nueva red de colágeno en todo su perímetro colindante, estimulando la regeneración con gran eficacia y máxima profundidad. Dado que no afecta a la superficie cutánea, carece de tiempo de recuperación”.