¿Cuál es la utilidad de la IA en cirugía estética y plástica? Una de sus aplicaciones prácticas, si no la más importante, es la evaluación del riesgo antes de una cirugía electiva. Esta detección puede ayudarnos a identificar y, por tanto, modificar y disminuir factores de riesgo y, por ende, evitar complicaciones en el procedimiento quirúrgico, mejorando así los estándares de seguridad. Es el nuevo paradigma, y está comenzando ahora.
Por el Dr. Williams E. Bukret
El potencial de la inteligencia artificial (IA) en medicina es enorme, evoluciona rápidamente y su implementación se está globalizando. La inteligencia artificial viene creciendo en los últimos años de manera exponencial. Se aplica en el desarrollo de trabajos de investigación para análisis de datos, así como para distintas tareas del mundo real1.
En la cirugía plástica podemos implementar IA para mejorar la seguridad de los pacientes, los procesos de toma de decisiones y la eficiencia en la práctica quirúrgica. La tecnología basada o asistida por IA está compuesta por un conjunto de herramientas y aplicaciones dentro de las cuales se encuentran el aprendizaje automático, el aprendizaje profundo, el procesamiento del lenguaje natural, el reconocimiento facial, de imágenes, y la robótica2,3.
Medir el riesgo
Una de las áreas de aplicación de primordial importancia tiene que ver con la seguridad. Actualmente, cuando estemos pensando en someternos a cualquier intervención quirúrgica deberíamos preguntarnos: ¿cuál es nuestro riesgo de tener complicaciones?
Para comprender la importancia de la implementación de la IA en cirugía basta con imaginarse la última vez que estuvimos en el hospital esperando para ser operados, o bien acompañando a alguno de nuestros seres queridos. Casi inevitablemente recordaremos que sentimos ansiedad ante tal circunstancia, miedo ante la posibilidad de una pérdida y angustia por la incertidumbre, por no saber lo que va a suceder.
Por consiguiente, reducir la incertidumbre posiblemente nos ayude un poco; y entonces surgen las siguientes preguntas: ¿cuáles son las probabilidades de que todo salga bien?, ¿o de sufrir alguna complicación? ¿Se puede calcular con cierta exactitud el desenlace? Y, más importante aún, ¿se puede prevenir dicha eventualidad? Estas son algunas preguntas para las cuales la inteligencia artificial puede darnos respuestas.
En el año 2020, durante la pandemia de covid-19, desarrollé el primer algoritmo de clasificación de riesgo en cirugía plástica e implementé el primer sistema de inteligencia artificial basado en aprendizaje automático para clasificar el riesgo de los pacientes de sufrir complicaciones en cirugía plástica. El sistema de clasificación utiliza un algoritmo o fórmula matemática compleja que, tomando los datos clínicos de los pacientes, puede predecir la probabilidad de sufrir complicaciones postquirúrgicas. Está basado en la investigación científica publicada en la revista de la Sociedad Americana de Cirujanos Plásticos (PRS Global Open) en julio de 20214.
Mediante nuestra aplicación AiRA10.0 (Artificial Intelligence Risk Assessment) podemos informar a cada paciente del nivel de riesgo. Asimismo, podemos indicarle los factores de riesgo que puede modificar para reducir el riesgo quirúrgico, lo que tiene gran importancia en la prevención de complicaciones en cirugías electivas, es decir, en aquellas que no son urgencias.
De esto justamente se tratan los modelos predictivos. De brindarnos información para decidir el mejor momento, el lugar más adecuado y las condiciones óptimas para someterse a una cirugía plástica sin correr riesgos innecesarios.
El sistema de clasificación utiliza un algoritmo matemático complejo que, tomando los datos clínicos de los pacientes, puede predecir la probabilidad de sufrir complicaciones postquirúrgicas
Ventajas de la evaluación
Hoy en día todos los pacientes pueden acceder a una evaluación online sin costo que utilizamos de forma rutinaria para conocer su riesgo antes de ir a la consulta.
La evaluación consiste en completar un formulario digital respondiendo algunas preguntas médicas y subir fotos de las zonas del cuerpo que quiera mejorar. Entonces, el sistema, automáticamente, clasificará en tiempo real su riesgo como alto, moderado o bajo, e identificará los factores de riesgo que podemos modificar para disminuir las probabilidades de tener complicaciones. En unas horas, los pacientes reciben el resultado del análisis.
La evaluación de riesgo es una de las aplicaciones prácticas que tiene la inteligencia artificial. Pero a continuación, mencionaré algunas más a modo de ejemplo. Desde la implementación de este novedoso sistema, al comienzo de la pandemia, hemos evaluado a más de 1350 pacientes, lo que nos ayuda de manera muy eficaz a identificar de forma sistemática a aquellos que requieren un análisis hematológico completo para la prevención de trombosis venosa y a detectar a esos otros pacientes que presentan signos de un trastorno dismórfico corporal, entre otras utilidades.
Trombosis venosa.
Una preocupación muy frecuente, por ser la causa fundamental de mortalidad en cirugía plástica, es la trombosis venosa profunda y el tromboembolismo pulmonar, que es la formación de coágulos en las venas de los miembros inferiores. Sucede más frecuentemente en pacientes de alto riesgo, incluyendo a pacientes mayores de 50 años, sometidos a cirugías prolongadas de más de 5 horas, a cirugías combinadas como abdominoplastia con liposucción, a liposucciones mayores a 3 litros; pacientes con índices de masa corporal mayor a 30 o con enfermedad pulmonar crónica5. Hay otros factores de riesgo tener antecedentes trombosis previas, tener antecedentes familiares de coagulopatias, arritmias, cáncer o enfermedades autoinmunes o el tabaquismo, entre otros, que solamente pueden ser detectados quitar con una exhaustiva historia clínica del paciente6.
La inteligencia artificial nos permite recolectar los datos, hacer un análisis, cuantificar automáticamente y predecir en tiempo real cuál es el riesgo de cada paciente de sufrir una complicación. También nos ayudará a identifica los pacientes en los que es necesario profundizar con los estudios necesarios para un correcto diagnóstico; como hacer tromboprofilaxis utilizando anticoagulantes, por ejemplo, entre otras medidas.
Dismorfia
Otra problemática común en la cirugía estética son las expectativas irreales de los pacientes, en algunos casos exacerbadas por el uso de redes sociales donde abundan las modificaciones digitales con filtros y que, si no son atendidas adecuadamente, podrían determinar insatisfacción con los resultados, frustraciones e incluso demandas legales. Esta problemática se presenta con frecuencia en pacientes que padecen trastorno dismórfico corporal (TDC), que es una condición psicológica en la cual las expectativas de los pacientes suelen ser irreales.
Según la literatura, la prevalencia es de entre un 5 y un 25 % de los casos, y según nuestra estadística de detección con IA ocurre en un 28 % de los casos, en ambos sexos. El TDC debe ser diagnosticado oportunamente por el especialista en salud mental, y su detección es de gran importancia, dado que permite diferenciar qué pacientes se beneficiarían de una cirugía plástica y cuáles requieren diagnóstico y tratamiento psicológico.
La inteligencia artificial nos ayuda a hacer detección (screening) de TDC previo a la cirugía, aún antes de que el paciente llegue a la consulta presencial
En cualquier caso, una vez detectados los signos, estos pacientes deben ser informados y evaluados por un especialista de la salud mental antes de decidir ir al quirófano, algo que en muchos casos se pasa por alto7. En este sentido, la inteligencia artificial nos ayuda a hacer detección (screening) de TDC previo a la cirugía, aún antes de que el paciente llegue a la consulta presencial.
Turismo sanitario.
La seguridad y la posibilidad de complicaciones son preocupaciones principales, especialmente en pacientes que, cada vez más, viajan para realizarse cirugías plásticas a otras ciudades y que, si bien representan un porcentaje bajo, es deseable reducirlas al mínimo posible, dado el impacto que tiene en los pacientes, sus familias y en los sistemas de salud de distintos países.
Además, la IA nos ayuda a informar adecuadamente a los pacientes mejorando los procesos de atención y de toma de decisiones. De esta manera podemos atender un gran número de consultas de pacientes online y, con todo, personalizar las evaluaciones de una manera efectiva.
Conclusiones
Estos son algunos ejemplos del uso de la IA que detectamos diariamente con AiRA10.0, que desarrollamos basándonos en la evidencia científica internacional para prevenir complicaciones en cirugía plástica y que tiene una efectividad del 97,3 % para clasificar el riesgo4.
Por consiguiente, podemos concluir que la aplicación ayuda a mejorar la planificación de las cirugías plásticas en beneficio de los pacientes4. Esta herramienta está disponible para todos los colegas que quieran implementar IA en su práctica, y creo que será de gran utilidad para quienes decidan optar por esta novedosa tecnología.
No obstante, la IA tiene múltiples aplicaciones más allá de la cirugía plástica: la robótica, el análisis de datos y las investigaciones científicas a futuro sobre ingeniería tisular, que tienen un largo camino por recorrer. En cuanto a nuestra especialidad, la inteligencia artificial se está implementando tanto en el área reconstructiva como en la estética para mejorar la calidad de atención y dar mayor seguridad a nuestros pacientes.
En resumen, la IA nos permite ahora hacer detección, predicciones y prevención de complicaciones mejorando los estándares de seguridad. Creo que, sin duda, la medicina predictiva y preventiva es el nuevo paradigma que está comenzando.
Referencias
- Perrault R, Shoham Y, Brynjolfsson E, et al. “The AI Index 2019 Annual Report”, AI Index Steering Committee, Human-Centered AI Institute, Stanford University, Stanford, CA. 2019.
- Kim YJ, Kelley BP, Nasser JS, Chung KC. Implementing Precision Medicine and Artificial Intelligence in Plastic Surgery: Concepts and Future Prospects.
Plast Reconstr Surg Glob Open. 2019;7(3):e2113. - Jarvis T, Thornburg D, Rebecca AM, Teven CM. Artificial Intelligence in Plastic Surgery: Current Applications, Future Directions, and Ethical Implications.
Plast Reconstr Surg Glob Open. 2020;8(10):e3200. - Bukret, WE. A Novel Artificial Intelligence–assisted Risk Assessment Model for Preventing Complications in Esthetic Surgery.
Plast Reconstr Surg Glob Open. 2021;9(7):e3698. - Rohrich RJ, Mendez BM, Afrooz PN. An update on the safety and efficacy of outpatient plastic surgery: A review of 26,032 consecutive cases.
Plast Reconstr Surg. 2018,(4):902-908. - Caprini JA. Thrombosis risk assessment as a guide to quality patient care. Dis Mon. 2005;51(2-3):70-78.
- Veale D, Gledhill LJ, Christodoulou P, Hodsoll J. Body dysmorphic disorder in different settings: A systematic review and estimated weighted prevalence.
Body Image. 2016;18:168-86.
