En la última edición de la AECEP Meeting, celebrada por la Asociación Española de Cirugía Estética Plástica, y más concretamente, en la mesa de lifting, el Dr. Jesús Olivas-Menayo presentó con una ponencia su técnica MICRO-lift, un procedimiento para el estiramiento cervical a través de la radiofrecuencia bipolar. Después, aceptó con gusto nuestra invitación a explicarla también para este medio.
Por el Dr. Jesús Olivas-Menayo
Después de la pandemia y con la generalización del uso de las videollamadas para mantener contacto, tanto laboral como social, la atención por el aspecto de la cara y el cuello se ha multiplicado, y los procedimientos en estas zonas han experimentado un gran aumento en su demanda.
Además, los tratamientos mínimamente invasivos han ido ganando terreno al conseguir buenos resultados sin un tiempo de recuperación tan prolongado comparados con las cirugías clásicas. Están muy de moda los “procedimientos de fin de semana”, en los que el paciente se interviene un viernes y prácticamente el lunes puede reincorporarse a su vida habitual. El ritmo de vida, cada vez más frenético, ha hecho que la cirugía plástica tenga que adaptarse, reduciendo los tiempos de recuperación con protocolos y técnicas cada vez más precisos.
A comienzos del año 2022 tuve la oportunidad de publicar un artículo sobre mi técnica MICRO-lift en una de las revistas internacionales más importantes de la especialidad de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética, la Aesthetic Plastic Surgery. Además, ya ha sido presentada en prestigiosos congresos como el encuentro internacional de AECEP, que tuvo lugar en Madrid a finales de noviembre. Esta técnica de rejuvenecimiento cervicofacial mínimamente invasivo va en sintonía con las nuevas exigencias de la sociedad actual.
MICRO-lift: Así se realiza
MICRO-lift es un acrónimo del inglés minimally invasive, combined radiofrequencies, outlpatient-lift, lo que significa que se trata de una técnica mínimamente invasiva que utiliza una combinación de radiofrecuencias para realizar un lifting cervicofacial de forma ambulatoria. Este innovador tratamiento permite eliminar la flacidez de los tercios inferiores de la cara y el cuello sin realizar cicatrices, a diferencia de los estiramientos clásicos. A través de 5 incisiones de 2 mm y situadas en la zona de la patilla, detrás del lóbulo auricular y en el mentón, se introduce una cánula de radiofrecuencia bipolar fraccionada.
Esta radiofrecuencia calienta los tejidos desde la profundidad, donde se alcanzan temperaturas de hasta 65 ºC, hasta la superficie, donde se alcanzan unos 40 ºC, realizando una coagulación subdérmica responsable de la contracción tisular. Además, el calentamiento de los tejidos produce una estimulación de los fibroblastos, principales células encargadas de la producción de colágeno y elastina y que se encuentran en mayor proporción en las regiones ligamentosas.
A través de 5 incisiones de 2 mm situadas en la zona de la patilla, detrás del lóbulo auricular, y en el mentón, se introduce una cánula de radiofrecuencia bipolar fraccionada
La intervención se realiza con una sedación consciente controlada por un anestesista, lo cual permite que el paciente esté completamente cómodo durante todo el procedimiento, viviendo una experiencia muy agradable.
Una vez que el paciente está sedado, se infiltra en la región a tratar una solución de suero mezclada con adrenalina y anestesia local. Esto reduce las molestias, así como las probabilidades de sangrado. Tras ello, se realizan las incisiones comentadas. Mientras que desde las incisiones de las patillas se trata el tercio inferior de la cara, desde la zona submentoniana y desde las zonas retrolobulares se realiza todo el tratamiento del cuello.
A través de las incisiones se introduce un finísimo terminal de radiofrecuencia bipolar fraccionada que irá tratando los tejidos más profundos. El dispositivo que se utiliza tiene una serie de sensores que minimizan el riesgo de quemadura. Esto, sumado a que se trata de radiofrecuencia bipolar fraccionada, reduce complicaciones de dispositivos más antiguos, a diferencia de otros aparatos de energías monopolares.
Una vez finalizado este procedimiento, se complementa el tratamiento aplicando una radiofrecuencia mediante microgujas que trata las zonas más superficiales de la piel. La combinación de estos dos tipos de radiofrecuencia permite tratar todos los planos responsables del envejecimiento cervicofacial.
El procedimiento dura aproximadamente una hora y media, y una vez realizado, el paciente puede irse a su casa. La recuperación de la vida social se suele iniciar a los 7 días de forma progresiva. Como cuidados posoperatorios requerimos el uso de una mentonera que el paciente llevará puesta las 24 horas del día durante los 5 primeros días, y posteriormente, durante 12 horas al día (que pueden incluir las horas de sueño) 10 días más.
El procedimiento dura cerca de una hora y media, tras lo cual el paciente puede irse a casa. La recuperación de la vida social se suele iniciar a los 7 días de forma progresiva
Reflexión
La cirugía plástica y la medicina estética están sufriendo una gran revolución gracias a toda la innovación que la industria está desarrollando. Los avances en el conocimiento de la anatomía y microanatomía cervicofacial nos han permitido saber qué zonas tienen mayor concentración de células fibroblásticas, que son las responsables de la producción de colágeno, una de las moléculas más importantes en el envejecimiento de los tejidos. Estimular estas zonas permite que el propio cuerpo reponga este colágeno y se rejuvenezca a sí mismo; por tanto, el futuro de los tratamientos médicoestéticos pasa por saber cómo estimular los mecanismos de regeneración que tiene el cuerpo humano.
En este sentido, el protocolo MICRO-lift consigue estimular esas áreas, permitiendo que los tejidos se contraigan y se rejuvenezcan de una forma endógena, es decir, a través de mecanismos biológicos de los que dispone el cuerpo humano y que ya son bien conocidos. El uso de radiofrecuencias en el interior del cuerpo no es un tema nuevo, ya que, desde hace años, los traumatólogos las usan para contraer ligamentos distendidos, especialmente en determinadas inestabilidades articulares.
En este caso, el procedimiento es similar, solo que en lugar de contraer ligamentos articulares o musculares con grandes dispositivos de radiofrecuencia, estamos contrayendo pequeños ligamentos cervicofaciales, responsables del envejecimiento de la cara y del cuello, con dispositivos muy pequeños.
El hecho de tratarse de una regeneración endógena implica que numerosos factores pueden influir en el resultado final. En este sentido, pacientes fumadores, con pieles excesivamente “solares”, con alteraciones del colágeno o con flacidez extrema pueden tener resultados más limitados.
Los primeros lifting cervicofaciales dejaban grandes cicatrices que iban desde la frente hasta la región occipital. La introducción de la toxina botulínica y el desarrollo de técnicas endoscópicas y mínimamente invasivas para mejorar el aspecto del tercio superior permitió limitar la incisión de estos procedimientos a las regiones pre- y retroauricular.
Posteriormente se desarrollaron las técnicas de lifting de cicatriz corta (short scar facelift) también conocidos como minilifting, con incisiones solo por delante de la oreja. Ahora, con la introducción del MICRO-lift, reducimos aún más las incisiones, simplificándolas en 5 puntos de entrada que prácticamente ni se ven, a través de los cuales podemos acceder a todo el tercio inferior de la cara y el cuello, considerados una misma unidad estética.
Artículo publicado en la revista Expertos en Medicina Estética – EME #48
