Otoño, el momento para planificar una remodelación corporal con la ayuda de la criolipólisis

criolipolisis

Llega el otoño y, con él, el momento perfecto para retomar las rutinas de belleza, ejercicio y alimentación sana. Es también un buen momento para planificar, sin prisas, esos retoques estéticos que ayuden a recobrar la confianza y la seguridad. Y, entre esos retoques, la remodelación corporal es uno de los procedimientos más demandados.

El exceso de grasa localizada en áreas específicas del cuerpo o bajo el mentón es la primera preocupación estética para los españoles y la segunda para las españolas (por detrás de la celulitis)[i]. Para atajar este problema, un 65% de los hombres y un 57% de las mujeres estaría dispuesto a realizarse un tratamiento no quirúrgico en los próximos dos años[ii]. En este contexto, una herramienta como la criolipólisis puede contribuir a satisfacer las expectativas de quienes no desean someterse a una intervención de cirugía.

Para acercarnos a esta técnica, debemos remontarnos a noviembre del año 2008. Fue entonces cuando un estudio publicado en la prestigiosa revista Laser in Surgery and Medicine abrió el camino a una nueva era en las técnicas para eliminar la grasa corporal. Hasta ese momento, el estándar de tratamiento eran técnicas invasivas, como la liposucción, que implicaban no solo la eliminación de las células grasas, sino también la de los tejidos adyacentes. Pero esta investigación, realizada por los reconocidos dermatólogos Dieter Manstein y Rox Anderson, puso el foco en una nueva herramienta, el frío, para lograr una destrucción selectiva de los adipocitos[iii].

En el artículo, titulado Criolipólisis selectiva: un método novedoso de eliminación de grasa no invasiva, ya se da nombre a la nueva técnica[iii] . Etimológicamente, criolipólisis significa destrucción de la grasa por el frío, y de eso precisamente trataba el estudio: de evaluar, en animales, si se podía hacer un daño selectivo a la grasa localizada a través de la aplicación de frío controlado en la superficie de la piel. A este primer trabajo, realizado en animales, le siguieron otros en humanos, que confirmaron que el frío puede provocar la apoptosis de los adipocitos o células grasas[iv].

Desde entonces, la criolipólisis ha sido el tratamiento elegido por millones de personas para eliminar la grasa de determinadas zonas de su cuerpo, pero sin los tradicionales procedimientos invasivos, dolorosos y que obligaban a los pacientes a seguir un molesto postoperatorio. En este sentido, la doctora Adriana Ribé, especialista en Medicina Estética, señala que “hoy se demandan tratamientos que permitan que el paciente no tenga que bajar su ritmo y pueda seguir con su vida. En este sentido, la criolipólisis cubriría esa necesidad: un tratamiento no invasivo, sin cirugía ni inyecciones y que no necesita reposo”.

Para conseguir la máxima satisfacción del paciente y no defraudar sus expectativas, es importante que se conozcan bien las indicaciones de la criolipólisis y para qué tipo de pacientes está pensada. Y aquí hay que desterrar falsos mitos, como el de que se trata de una técnica para adelgazar o de una alternativa a la liposucción. Como señala la doctora Margarida dos Santos, especialista en Medicina Estética, “un error común entre las personas que no conocen la técnica de la remodelación corporal es el de pensar que solo se interesan por ella quienes tienen un evidente y severo problema de acumulación de grasa. Pero los expertos en Medicina Estética sabemos que no es así: hay un tipo de pacientes que, estando en normopeso, tienen alguna zona de su cuerpo que quieren mejorar. Una zona en la que la grasa se ha hecho ‘resistente’ y que resulta muy difícil de eliminar con dieta y ejercicio”.

Estas zonas, por lo general, son caderas, abdomen, cara interna y externa de los muslos, carilla interna de las rodillas, brazos, espalda alta y baja, flancos, el tejido del pecho y el área de debajo del mentón. Son zonas en las que se producen esas pequeñas acumulaciones de grasa corporal que, como ha señalado la experta, no desaparecen con las estrategias habituales de pérdida de peso. Por eso, la literatura recomienda el uso de la criolipólisis para su implementación únicamente con fines estéticos y en aquellas personas que se encuentran dentro de un rango de peso apropiado para su talla y edad, que realizan ejercicio de manera regular, mantienen una dieta saludable[v].

Teniendo en cuenta estas indicaciones, así como pensando siempre en la satisfacción de los pacientes, la criolipólisis se consolida como una técnica de tratamiento para la reducción del exceso de tejido adiposo localizado, que no daña los tejidos adyacentes y que no requiere cirugía, reposo o sistemas de compresión en el postoperatorio.


[i] CoolSculpting® Consumer Awareness, Market Sizing, and Attitudinal Insights Study (Phase 1 International Results by Gender) – December 2017

[ii] ZELTIQ Company Market Research 2016/17

[iii] Manstein D, et al. Selective cryolysis: a novel method of non-invasive fat removal. Lasers Surg Med. 2008 Nov;40(9):595-604.

[iv] Avram M. M, et al. Cryolipolysis™ for subcutaneous fat layer reduction. Lasers Surg. Med. 41:703–708, 2009.

[v] 5 . Krueger N, Mai S, Luebberding S, Sadick N., Cryolipolysis for noninvasive body contouring: clinicalefficacy and patient satisfaction. Clin Cosmet Investig Dermatol. 2014; 7:201-5.