WOPRASS: Visibilizando a las cirujanas

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La asociación WOPRASS (Women’s Organization of Plastic, Reconstructive and Aesthetic Spanish Surgeons) se presentó en plena pandemia. Sin embargo, esto no silenció la llegada de una agrupación que, precisamente, nace para ser “voz, foro de discusión y red de apoyo” para las cirujanas plásticas, reparadoras y estéticas. Hablamos con su presidenta, la Dra. Nélida Grande, y con su predecesora, la Dra. Marisa Manzano.

Dra. Nélida Grande – Presidenta de WOPRASS

Presidenta de WOPRASS. Responsable de la Unidad de Cirugía Plástica y Reparadora de la Clínica Nélida Grande (Barcelona) y del Hospital L’Esperit Sant. También pasa consulta en la Clínica Diagonal de Barcelona.

Pregunta- ¿En qué momento surge Woprass y por qué? ¿Hay un momento de inflexión, un contexto concreto, o se trata de un proyecto que ya llevaba tiempo fraguándose?

Respuesta- Surge en el momento en que se necesita. En estos últimos años, con el movimiento de la mujer y en su empoderamiento, ha resurgido la necesidad de hacernos más visibles, de intentar que sea efectiva esa igualdad entre hombres y mujeres en el ámbito de nuestra especialidad.

P.- Por lo que leemos en el perfil de Instagram de la asociación (@woprass), ud. fue el “germen” de su asociación, creando un chat a nivel nacional de cirujanas plásticas. ¿Qué extrajeron de esa experiencia? ¿Sigue en activo?

R.- Sí, el chat sigue activo, y sigue sirviendo como apoyo, como consulta, como siempre lo hizo. Surgió para estar juntas en los congresos a nivel lúdico y médico cuando no conoces a nadie; lo iniciamos entre unas cuantas conocidas para quedar y no hubo hombres, y así nos sentimos mucho mejor, más comprendidas y apoyadas. A partir de ahí se formó un conjunto de mujeres que comentábamos casos, intercambiamos experiencias y consejos; lógicamente, todo referido a nuestra profesión… Y ahora somos alrededor de unas 180 mujeres.

P.- ¿Por qué hace falta una organización de cirujanas plásticas, reparadoras y estéticas con esta perspectiva de género?

R.- Creemos que nos ayuda a crecer entre nosotras como mujeres, a tener fuerza frente a nuestros compañeros masculinos, a no dejar que haya discriminación de ningún tipo. También para intentar educar con respecto a la imagen de la mujer, garantizarle respeto y no dejar que se cosifique. Queremos dar apoyo a las nuevas generaciones, aportar nuestro granito de arena a nivel científico, humanitario y en todo lo que podamos ayudar.

En resumen, nuestro objetivo, como dice uno de nuestros principios básicos como asociación, es “impulsar la igualdad efectiva entre hombres y mujeres en la carrera profesional, y especialmente luchar contra los obstáculos de género que limiten o impidan la promoción profesional de las cirujanas plásticas, reparadoras y estéticas, promoviendo la implementación de políticas activas”.

Esta asociación no está bien vista por algunos compañeros y también compañeras; y realmente no debería existir, porque así viviríamos en un mundo de iguales, pero no es así. Estamos para ser vistas, y no somos la única asociación de mujeres, existen también en otras especialidades.

“Queremos educar con respecto a la imagen de la mujer, garantizarle respeto y no dejar que se cosifique. También, dar apoyo a las nuevas generaciones, aportar nuestro granito de arena a nivel científico y humanitario”

P.- ¿Qué dificultades u obstáculos se encuentran las mujeres a la hora de acceder a esta especialidad y desarrollarla? Y, una vez obtenida la especialidad, a la hora de ejercerla.

R.- Para llegar a ella, los mismos que nuestros compañeros, la dificultad lógica de la carrera y el estudio, pero sí que este proceso está acompañado, a veces, de acosos o insinuaciones.

El problema es al ejercerla. Es difícil a veces ver jefas de servicio. O, ante una plaza, puede existir una valoración en contra de la mujer. Ya les digo: cada vez menos, y estamos para no dejar que eso ocurra. Actualmente estamos contentas porque ya se ha iniciado el proceso del cambio; por ejemplo, es efectivo que ya hay una presidenta en la AECEP que es la Dra. Isabel Moreno, y la próxima presidencia de SECPRE será para una mujer, la Dra. Isabel de Benito.

P.- En la práctica de esta especialidad, ¿dónde podemos advertir, por ejemplo, esta falta de igualdad efectiva?

R.- Por suerte, cada vez hay más mujeres que ejercen la medicina, pero la competitividad es tan intensa por los hombres… Eso hace que muchos puestos estén ocupados por ellos y no por mujeres, a pesar de ser una mayoría. Ahí queremos ser activas, para que nuestras compañeras puedan acceder con las mismas oportunidades a los mismos puestos.

P.- ¿Qué opinan de la diversidad en los congresos, eventos y foros?

R.- Ahí es donde más se ve la diferencia: siempre hay más hombres que mujeres en los paneles porque no se cuenta con ellas o porque, al no tener tanto ego como ellos, no estamos en primera fila. No es porque no queramos, simplemente porque, como siempre, no somos lo suficientemente visibles.

Como decimos en nuestros fines constitutivos, “queremos divulgar y capacitar en torno a la igualdad, fomentando el diálogo sobre las problemáticas que afectan a la mujer en su desarrollo profesional y puestos de trabajo, dentro del sistema sanitario en general y de la Cirugía Plástica, Reparadora y Estética en particular”.

P.- ¿Qué acciones están llevando a cabo desde la organización y cuáles planean para un futuro próximo o a medio plazo?

R.- Nuestra acción principal es estar siempre presentes en todos los congresos; de hecho, tuvimos una ponencia en la reunión de la SECPRE que se organizó en mayo de este año en Santiago de Compostela. Queremos que puedan participar las mujeres que tengan algo que decir, mantener la actualización a nivel científico y participar en todo lo que sea necesario para dar visibilidad y más apoyo a nuestras compañeras. De todas maneras, no pretendemos solo sectorizarnos nosotras, también queremos que nuestros compañeros participen en nuestras reuniones.

Dra. Marisa Manzano – Expresidenta de WOPRASS

Expresidenta de WOPRASS. Cirugía Plástica, Estética y Reparadora y Medicina Estética en la Clínica Sagrada Familia (Barcelona).

Pregunta- Fue la primera presidenta de Woprass. ¿Con qué objetivos o qué expectativas cogió el cargo? ¿Cambiaron esas sensaciones a medida que pasaba el tiempo?

Respuesta- Fue un momento muy emocionante porque empezamos de manera formal una iniciativa que ya llevaba tiempo en marcha: la reunión de cirujanas plásticas una o dos veces al año donde combinábamos ciencia y momentos lúdicos. Los objetivos de la primera junta fueron poner a WOPRASS en el mapa, dar a conocer que teníamos una serie de inquietudes y que nuestra voz debía ser también tenida en cuenta. En mitad de nuestro recorrido surgió la pandemia, pero eso no puso freno a seguir con nuestras actividades y, como la mayoría de asociaciones científicas, mantuvimos webinars sobre temas concretos de nuestra especialidad que luego prolongábamos con conversaciones sobre nuestras vidas.

P.- ¿Cómo acogió su sector el nacimiento de la asociación Woprass? ¿Le llegaron comentarios que le sorprendieron de colegas?

R.- Hubo de todo: sorpresa, rechazo, indiferencia… pero para la mayoría de nuestros colegas se vio como algo necesario que podía dar el impulso que buscábamos. Hay que cambiar la mentalidad machista a todos los niveles, y hay que ser conscientes de que existen actitudes, comentarios y pensamientos del día a día que menosprecian a la mujer. En ningún momento hemos pretendido ser radicales, aunque alguna de nuestras acciones se haya visto como tal, solo defendemos lo que creemos que deben ser unos mínimos de ética en nuestra profesión.

P.- ¿Se han encontrado con obstáculos o reticencias como asociación para realizar alguna acción?

R.- Sí, pero eso ocurre siempre que se inicia cualquier proyecto de la índole que sea. Lo importante es tener claro cuál es el objetivo y cómo se pretende llegar a ello. El nuestro es que se nos considere con la misma valía profesional y que se nos dé acceso a ser referentes en nuestro ámbito.

“En ningún momento hemos pretendido ser radicales, solo defendemos lo que creemos que deben ser unos mínimos de ética en nuestra profesión”

P.- ¿Tiene algún ejemplo o experiencia personal en esta etapa que pueda compartir y que pueda servir como ejemplo de contra qué lucha esta asociación?

R.- Hay muchos ejemplos y anécdotas, pero la que más nos ha marcado es intentar hacer entender a nuestros compañeros de profesión que la exposición del cuerpo femenino debe tener una serie de límites cuando lo hacemos desde el punto de vista médico. En general, la cosificación de la mujer está tan enraizada en nuestra sociedad que muchos todavía no lo entienden.

P.- Sabemos que Woprass quiere ser un foro, un espacio de representación y referencia de cirujanas y un foco de visibilidad. Pero, ¿qué objetivos concretos persiguen o qué acciones concretas quieren llevar a cabo? Por ejemplo, como decía, uno de sus objetivos era precisamente eliminar los anuncios que cosifican el cuerpo de las mujeres.

R.- Efectivamente, es uno de los objetivos que más nos ocupan. En la actualidad, la mayoría de las asociaciones científicas de cirugía plástica como ISAPS a nivel internacional o la americana ASPS tienen secciones de mujeres, porque a nivel numérico somos todavía minoría. Esto puede no parecer relevante, pero lo es; si no tenemos una voz que nos represente es muy fácil caer en los típicos estereotipos de “cirujano plástico varón que solo opera pechos y el dinero es lo que más importa”. Existen muchas subespecialidades, desde la microcirugía hasta la cirugía de mano o de quemados, pero eso está claro que vende menos. Uno de los objetivos de nuestra junta fue estudiar cuál era la situación de las cirujanas plásticas en España, se publicó incluso un artículo en la revista de Cirugía Plástica Ibero-Latinoamericana y han ido apareciendo más de otros países con la conclusión de que todos tenemos las mismas dificultades. Compaginar familia y trabajo para las mujeres sigue siendo más difícil que para los hombres.

P.- En su web dicen que WOPRASS hace suyos los valores de Women Plastic Surgeons Forum y sigue su ejemplo. ¿Por qué creen que es un espejo interesante en el que mirarse; qué supone esta organización? ¿Qué acciones interesantes ha emprendido?

R.- Esta fue una de las primeras secciones en una asociación científica, la americana, que dio visibilidad a las pocas mujeres que había; eran menos del 10 %. Facilitó que se conocieran entre ellas y este networking generó oportunidades a todas ellas. A nosotras nos ha servido para lo mismo, para conocernos mejor, saber que en esta carrera de obstáculos no estamos solas. Yo he sido la primera asociada internacional que formó parte de este grupo.

La mayoría de mujeres siguen prefiriendo las especialidades médicas a las quirúrgicas. La causa de esto es multifactorial: mayor dificultad técnica, más variabilidad horaria, menos referentes…”

P.- ¿Qué diferencias ve entre ambos países o entre sus instituciones en este sentido, en cuanto a visibilidad y representación de as cirujanas, etc.?

R.- El entorno es un poco diferente. El acceso a las especialidades que tienen en Estados Unidos no tiene nada que ver con el nuestro. En cierta forma, el nuestro es más democrático. Lo sorprendente es que, a pesar de tener las mismas oportunidades a la hora de elegir especialidad en España, la mayoría de mujeres siguen prefiriendo las especialidades médicas más que las quirúrgicas. Por eso seguimos siendo menos. La causa de esto es multifactorial: mayor dificultad técnica, más variabilidad horaria, menos referentes… No se ha estudiado a fondo todavía.

P.- ¿Hace falta, también, realizar una labor de concienciación o de “empoderamiento” de cara a las mujeres cirujanas? Como decía la Dra. Grande, también es necesario un cierto nivel de ego o de autoconfianza para estar en primera fila u ocupar determinados espacios.

R.- Es cierto que tenemos mayor espíritu colaborativo que los hombres y que nuestro estilo de liderazgo es menos agresivo. Existen muchos prejuicios todavía que viven en nuestra sociedad y cambiar eso de la noche a la mañana no es posible. La manera de hacerlo es dando buen ejemplo, pero a todos los niveles: trabajo en equipo, equidad, confianza, visión y empatía.