Son muchos los tipos de manchas que van apareciendo sobre la piel a lo largo de la vida. Aunque a veces puedan parecer iguales, no todas son lo mismo ni se tratan igual. Existen varios tipos, como los léntigos solares, que son unas manchas marrón claro, lisas, salpicadas en zonas fotoexpuestas, como cara o dorso de las manos. Por otro lado, están las queratosis seborreicas, que son lesiones marronáceas, más elevadas, a veces rugosas, y pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo, expuesto o no expuesto al sol.
También está el melasma, que son aquellas manchas más extensas y suelen aparecer en el embarazo o con la toma de anticonceptivos orales. Suelen afectar a la zona central del rostro como frente o labio superior, aunque también es habitual que afecte las mejillas. Por último, se pueden encontrar también los nevus o lunares, que en la zona facial suelen ser más verrucoso, tiene un aspecto de verruga, llamados nevus intradérmicos.
Pero no debemos olvidar que las manchas que más nos deben inquietar son los melanomas; a veces pueden comenzar como una mancha muy banal, por eso es esencial un buen diagnóstico de las manchas y determinar el origen y tratamiento más específico de cada una.
Entre sus múltiples disciplinas, Martín del Yerro Cirujanos Plásticos | Amselem Médicos Estéticos cuenta con un equipo de profesionales expertos para conseguir que sus pacientes se sientan seguros, cuidándoles en cada aspecto de sus salud, y sacando lo mejor de ellos para potenciar su belleza natural, y así darles la confianza que necesitan en su día a día.
Respecto a los tratamientos disponibles en la clínica, para tratar los léntigos solares dispone de la luz pulsada intensa, consiguiendo no solo tratar y mejorar este tipo de mancha, sino que también tratando todos aquellos “vasitos” o rojeces a la vez, para mejorar la calidad de la piel.
Para las queratosis seborreicas, la luz pulsada no suele ser es suficiente, por lo que suele ser frecuente recomendar a los pacientes asociar un tratamiento más ablativo, como es el láser de CO2 o el curetaje superficial de las mismas.
Para el melasma, el tratamiento es más complejo, individual y verdaderamente una carrera de fondo. Lo importante es establecer un buen diagnóstico, eliminar todos aquellos factores que los estén desencadenando o empeorando, y establecer de base un tratamiento médico cosmético, e incluso a veces se recomienda utilizar medicación oral. Para ayudar a su manejo, se puede hacer uso de diferentes peelings que ayudan a la renovación de la piel y a la mejoría de del melasma, así como el resto de la piel no afectada por el mismo.
Para los nevus intradérmicos, aquellos lunares de aspecto verrucoso, lo primero es establecer un diagnóstico correcto, y si se desea extirpar la lesión, se puede realizar una extirpación del mismo con láser de CO2.
Respecto a las cicatrices, existen diferentes tipos que pueden preocupar a los pacientes que llegan a la clínica Martín del Yerro | Amselem.
Por un lado, está el proceso de cicatrización normal, en el que las cicatrices tienen un color más rojizo o rosado, y con el tiempo van cambiando al color blanco nacarado, típico de las cicatrices. Se ha descrito que realizar un tratamiento precoz de las cicatrices con láser vascular y láser fraccionado de CO2, incluso en la retirada de puntos, ayuda a que mejore la cicatrización.
Cuando el paciente se encuentra ante un proceso de cicatrización anómalo o alterado, como pueden ser las cicatrices hipertróficas o los queloides, se debe empezar a trabajar esas cicatrices para mejorar el aspecto y, sobre todo, que no vayan a más.
Los conocidos “queloides” suelen aparecer en cicatrices tras una intervención quirúrgica, traumatismos o por acné, y aparecen sobre todo en tórax, espalda y zona del pubis. Son cicatrices grandes, elevadas, que sobresalen la zona de la cicatriz y suelen ser de color rosado, aunque algunas con más tiempo de evolución suelen ser más marronácea.
El tratamiento es un auténtico reto, y para ello, los profesionales de la clínica utilizan diferentes tratamientos, como las microinyecciones de corticoides o de 5-fluorouracilo, el uso de luz pulsada intensa para el componente vascular.
En cuanto a las cicatrices atróficas, son aquellas que a diferencia de las hipertróficas se quedan hundidas, deprimidas, muy típicas de quemaduras o las típicas cicatrices faciales del acné.
En estos casos se utilizan otro tipo de tratamientos, con los que se quiere aumentar la producción de colágeno, como el láser fraccionado de CO2. Habitualmente, hacen falta varias sesiones para lograr una mejoría de las mismas. También suele ser común el uso de la luz pulsada intensa para mejorar la rojez o eritema de este tipo de cicatrices, y en algunos casos hará falta incluso la infiltración con ácido hialurónico para mejorar su aspecto y conseguir una mayor elevación.
La clínica Martín del Yerro | Amselem, compuesta por profesionales de máximo prestigio, combina los procedimientos más innovadores con un conocimiento absoluto sobre los tratamientos que se pueden realizar para conseguir que sus pacientes se sientan bien por fuera y por dentro, sin olvidar los valores de naturalidad, seguridad y honestidad que les caracterizan.
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