¿Están sustituyendo los estimuladores de colágeno inyectables a los hilos?

De los hilos tensores de hace unos años hemos pasado a oír hablar de los inductores de colágeno infiltrados. ¿Qué ha pasado? Lo explica el Dr. Antonio Carvajal, experto en medicina estética con clínica en Oviedo.

¿Quién es quién?

Hace una década, el tratamiento de elección mínimamente invasivo a la hora de mejorar la firmeza del rostro solían ser los hilos o suturas. Elaborados sobre todo a base de Polidioxanona (PDO), se anclan en los tejidos y traccionan en mayor o menor medida en la dirección oportuna. Son reabsorbibles y capaces de generar nuevo
colágeno y elastina a su alrededor. Progresivamente, hemos ido escuchando cada vez más hablar de los fillers estimuladores también de colágeno: sustancias como la hidroxiapatita de calcio que se infiltran en zonas estratégicas del rostro para activar la producción natural de esta proteína. ¿Es posible que estos estén sustituyendo a los hilos? Preguntamos al Dr. Antonio Carvajal, especialista de medicina estética con consulta en Oviedo.

Doctor, ¿observa esta evolución?

Sí, creo que cada vez se utilizan más los inductores de colágeno como sustitutos de los hilos tensores, por motivos como la facilidad técnica del tratamiento, la recuperación y las necesidades del paciente, que progresivamente acude a nosotros más temprano.

Existen diferentes inductores de colágeno que se han venido utilizando tradicionalmente como la Hidroxiapatita Cálcica, el ácido Poliláctico o la Policaprolactona; además en los últimos años hemos visto el desarrollo de los Inductores de Colágeno Híbridos que son mezcla de ácido Hialurónico con inductores de colágeno propiamente dichos. Con ello, el paciente va a percibir un mejoría inmediatamente después del tratamiento debido al efecto del ácido hialurónico y a medio plazo notará el efecto tensor de la Hidroxiapatita Cálcica.

¿Cuándo y para qué se utiliza cada uno?

La gran diferencia es la potencia de acción. Cuando utilizamos hilos tensores pensamos en pacientes con flacidez moderada porque pueden tener un efecto tensor mayor y con una duración de aproximadamente 24 meses.

En cuanto a los inductores de colágeno, el ácido Poliláctico para mí es el que tiene un efecto más potente en cuanto al tratamiento de la flacidez y con una duración entre 18-24 meses, aunque es el que más efectos secundarios ha reportado históricamente. La hidroxiapatita y la policaprolactona, aunque el efecto tensor puede que no sea tan potente, mejora mucho la calidad de la piel con una duración similar de entre 12-18 meses, por lo cual dependiendo de las características del paciente utilizamos uno u otro.

Hay quien teme a los inductores por posibles bultitos, y a los hilos porque se perciba ópticamente alguna parte de la sutura

Aunque no son habituales, los efectos secundarios en los inductores pueden presentarse asociados a diferentes factores como la experiencia en el uso de este tipo de productos por parte del médico, la realización de una adecuada técnica de inyección y la respuesta inmunológica intrínseca del paciente. Por otro lado, percibir algún pliegue en el tratamiento con hilos podría suceder durante los primeros días después de su colocación y se resuelve solo. Si persiste se debe revisar al paciente para valorar el plano de colocación o la respuesta de la piel al tratamiento.

¿Existe una edad para cada opción?

Más que una edad, yo diría que existe un tipo de rostro o de paciente para cada tipo de tratamiento. Es el criterio médico con el conocimiento de todas las técnicas disponibles el que debe primar en el momento de la decisión del tratamiento.

En definitiva, ¿por qué crees que los inductores sustituyen a los hilos cada vez más?

Son tratamientos con unos resultados muy efectivos y naturales que no solo mejoran la sensación de flacidez, también la calidad de la piel, algo en lo que cada vez nos centramos más los médicos estéticos.